miércoles, 24 de julio de 2013

Los Huesos de San Pedro



Piero de Garzarolli. Roma, 13, (AP)
Una arqueóloga italiana que cree que identificó los huesos de San Pedro, dijo que pasó once años antes de poder resolver el enig­ma de un vacío monumento fu­nerario debajo de la Basílica del apóstol en el Vaticano.
La profesora Margherite Guar­ducci, especialista en inscripcio­nes antiguas de la Universidad de Roma, dijo en conferencia de prensa que comenzó la in­vestigación después de "dar por casualidad" con una urna fune­raria por mucho tiempo olvidada.
Los resultados de sus investiga­ciones lograron grandes titulares cuando la oficina impresora del Vaticano comenzó la publicación de un libreo de la profesora.
"L'Osservatore Romano", órga­no del Vaticano, dijo entonces que la profesora Guarducci estaba convencida que "los huesos de San Pedro han sido final y defi­iitivamente identificados".
"Me llamaron la atención dos techos", dijo la profesora ayer. "Un hueco en la tierra cerca de la estructura fúnebre, que ob­viamente era una tumba, estaba vacío, corno si su contenido hu­biera sido sacado apresuradamen­te. Segundo, la lápida inscripta escondía una cámara interior don­de encontré pequeñas reliquias de huesos humanos."Entonces alguien me dijo que muchos años atrás los excavado­res habían limpiado la cámara interior, colocaron todo en una pequeña caja de madera y la de­jaron en una habitación en la Gruta del Vaticano".
La profesora Guarducci dijo que encontró la caja el verano de 1963 y halló que contenía huesos humanos y restos de una manta roja bordada en oro.
El profesor Venerando Correnti, antropólogo de la Universidad de Palermo, fue consultado. Conclu­yó que los huesos hallados en la caja eran los de "un hombre adulto, de unos 60 a 70 años de edad, y de robusta contextura"
información que la Oficina de Prensa del Vaticano dijo que co­rrespondía a lo que se conoce de las características físicas de San Pedro.
La arqueóloga dijo que las por­ciones de tierra halladas en la caja eran exactamente igual a la tierra en la cámara escondida.
"Eso me llevó a una conclu­sión", dijo.
"San Pedro fue originalmente sepultado cerca de la estructura funeraria. Luego, durante el rei­no del Emperador Constantino (siglo cuarto) sus restos fueron escondidos en la cámara para
evitar saqueos, y cubierto por monumentos sobre los c se construyeron los tres altares
"En 1950 los investigadores abrieron la lápida inscripta  en la pared y hallaron los huesos sin sospechar que habían descubierto lo que he buscado por siglos, los restos de San Pedro” –dijo la Profesora.